sábado, 28 de enero de 2012

Estructura del conocimiento humano

He recibido múltiples comentarios sobre los artículos que he publicado en este blog y he observado que hay una mala interpretación que se repite, constantemente.
Pretendo entonces resolver ciertas dudas y malas interpretaciones con este artículo, en donde explicaré el esquema, la estructura del saber humano, estableciendo las diferencias que hay entre la Lógica, las teorías, las creencias, los dogmas y las cosmovisiones o paradigmas.

Una de las confusiones habituales que surgen de la reflexión que la gente hace cuando lee mis artículos, tiene que ver con el lenguaje descriptivo, con los conceptos que utilizo para describir todo este nuevo paradigma. Este problema tiene que ver con que no se ha entendido que lo que estoy planteando es una nuevo paradigma, por tanto, el significado, la definición que tienen los conceptos que uso para describir esta nueva forma de entender el Universo, son distintos a los significados que tienen en otros paradigmas, es precisamente por eso que he comenzado re-defininiendo conceptos tales como Organismo, Espacio o Dimensiones, de manera tal que cuando digo Organismo, Espacio o Dimensiones dentro del desarrollo de lo que llamo Tercer Paradigma, no se debe ni puede entender de la misma exacta manera que se entiende cuando estas palabras son usadas dentro del marco del Paradigma científico (Segundo Paradigma). Precisamente una de las razones por las cuales ni en el primer paradigma (mítico) ni en el segundo paradigma (científico) podíamos ver satisfecha nuestra aspiración de una descripción lógica, coherente y Universalmente válida del Universo, es porque en estas cosmovisiones el lenguaje, el sistema conceptual (los conceptos y la forma en que se relacionan) no es ni será nunca coherente, ni como sistema en sí, ni contrastado con la realidad.

Epistemología y Gnoseología.

Desde el punto de vista del análisis que hago en estos artículos, lo que el ser humano llama conocimiento se ha desarrollado de una manera especifica que veremos más abajo. Antes quisiera establecer la diferencia entre conocer, creer, entender y comprender.

Tanto dentro de la epistemología como de la gnoseología el ser humano sitúa a las creencias religiosas como un tipo de conocimiento o vía de conocimiento. Para mi es claro que hay importantes distancias entre creer, conocer, entender y comprender.

Conocer: Conocer es simplemente darse cuenta de algo, percibirlo. Puedo conocer lo que llamamos dolor, color, sabor, amor, Universo, gente, mundo, sociedad, comunidad, etc.

Creer: Creer es tener una explicación ilógica o incompleta (en desarrollo o intuitiva) de lo que se conoce. Cree aquel que intenta darse una explicación o adoptar una explicación pero, dicha explicación o descripción no resulta, ni consistente con lo que es posible conocer (percibir) ni con la lógica. Por ejemplo uno puede creer que la Luna está hecha de queso, lo que explicaría la razón por la cual está llena de cráteres, o podría creer que existen partículas indivisibles de las cuales está hecho todo el Universo, lo que explicaría el comportamiento mecánico que aparenta tener el Universo, sin embargo no se cuenta con un sistema conceptual coherente para que podamos llamarlo con propiedad, entendimiento. Aquí las incoherencias del sistema pueden ser de dos tipos.
1-      Incoherencias del sistema conceptual en sí mismo: Ocurren cuando la simple y sola definición del concepto ya es errónea, por ejemplo, para el caso de lo que Demócrito llamó átomo y lo que la ciencia llama partículas indivisibles. El concepto de algo indivisible (atómico) es de por sí erróneo ya que la división o indivisión de algo no puede ser jamás una cualidad del objeto que se pretende definir, sino que depende de la interacción entre un objeto cualquiera y alguien que intente dividirlo (ver los videos)
2-      Incoherencias del sistema conceptual con la realidad percibida, conocida. Por ejemplo, cuando uso el concepto de Caballo alado. El concepto en sí mismo no está mal definido, teóricamente podría existir un caballo alado, pero no ha sido percibido de ninguna manera, no se ha podido observar su participación en los fenómenos del Universo de ninguna otra manera que no sea como elemento mitológico.

Entender: Entiende aquel que es capaz de dar una explicación racional a un fenómeno cualquiera más allá de si ha podido conocer o no dicho fenómeno. Por ejemplo, cuando una persona es capaz de, usando un sistema conceptual coherente, dar una explicación lógica sobre el movimiento de traslación de un planeta, independientemente de si el movimiento de este planeta es una cuestión que conoce, que percibe o percibido por sí mismo, de manera, directa (con sus sentidos) o indirectamente (con aparatos tecnológicos que le permiten ampliar su percepción).

Comprender: Comprende aquel que, además de entender y percibir un fenómeno cualquiera, ha incorporado dicho fenómeno a sí mismo como si esto formara parte de él, sea de la manera que sea (o que corresponda). Por ejemplo, una persona cualquiera puede entender el funcionamiento de una bicicleta y ha observado como se maneja una, pero jamás ha podido, por sí mismo, manejar una bicicleta, mucho menos al punto de controlarla como si esta formara parta de su propio cuerpo. Cuando logra controlarla como si formara parte de su propio cuerpo, entonces podemos hablar de que comprende el funcionamiento de la bicicleta, no solo la conoce, cree en ella o la entiende simplemente.

Desarrollo del conocimiento humano.

En el intento del ser humano por comunicar lo que conoce (percibe), cree, entiende y/o comprende, se han desarrollado una serie de doctrinas religiosas, corrientes filosóficas, teorías científicas, cosmovisiones de diversa índole que tratan de sistematizar una serie de descripciones o explicaciones de los fenómenos que ocurren en el Universo.
El esquema de todas estas creencias, dogmas, cosmovisiones y teorías que tengo en mente y que planteo para que se entienda el desarrollo histórico de lo que el ser humano llama conocimiento, es el siguiente.

Primero tenemos los Paradigmas o Cosmovisiones, que son los más amplios márgenes dentro de los cuales se desarrolla una línea de explicación posible, acá encontramos por ejemplo, lo que llamo paradigmas o cosmovisiones míticas, que son el Primer Paradigma que usa el ser humano, en el cual las explicaciones de los fenómenos del Universo se reducen al comportamiento y relación existente entre una divinidad o una serie de divinidades con la naturaleza o con otras divinidades.
Luego comienza a surgir la filosofía y, dentro de ella, el ser humano desarrolla una herramienta fundamental sobre la cual resulta posible estructurar una interpretación universalmente válida y coherente del Universo, la Lógica.
Es importante entender que la Lógica es una herramienta que nos permite desarrollar una interpretación del Universo y que ésta herramienta es usada (con las limitaciones y contradicciones analizadas en este blog) por la Ciencia, pero que no es patrimonio exclusivo de la cosmovisión científica, vale decir, es posible y necesario estructurar una cosmovisión distinta a la cosmovisión científica con la herramienta de la Lógica, precisamente además, porque el Paradigma científico está en contradicciones lógicas que dejan en evidencia la obsolescencia de la Ciencia como interpretación de los fenómenos del Universo.

La Cosmovisión científica es UNA de las vías de desarrollo posible del conocimiento, estructuradas sobre la base de la Lógica, pero es una vía errada, equivocada.
Lo que propongo y hago es explorar una vía de desarrollo posible del conocimiento humano estructurado sobre la base de la Lógica que supere o enmiende las contradicciones de la Cosmovisión científica. Nada tengo en contra de la ciencia ni de los científicos, muy por el contrario, simplemente resulta evidente que las bases del Paradigma científico fueron fundados en premisas erradas que, por lo tanto, nos han llevado a la construcción de una interpretación errada. Tampoco resulta sorpresivo que así sea, después de todo estas premisas erradas surgen en un momento histórico en el cual el razonamiento, la lógica y la observación estaba en pañales, era muy precaria.

Entendamos entonces que la Estructura del Conocimiento humano, haciendo una analogía, es similar a la estructura de las normas jurídicas. Las leyes tienes un orden jerárquico en cuya cima se encuentran (en términos generales) los tratados internacionales, luego de eso están las constituciones de cada Estado, luego las Leyes, etc. En la estructura del conocimiento humano y por razones distintas, están primero los Paradigmas o Cosmovisiones, luego de ello es posible realizar especulaciones de tipo teórica que deben estar en coherencia con el paradigma, y luego, podemos comprobar la valides de dichas teorías gracias a la observación empírica. Esta estructura jerárquica, esta forma de indagar los fenómenos del Universo más la herramienta de la Lógica y la observación empírica, no cambian en el Tercer Paradigma, lo que cambia es el Paradigma y, por lo tanto, las especulaciones teóricas posibles de indagar con el Tercer Paradigma y los conceptos, el lenguaje, el sistema conceptual que necesitamos para describir el Universo de una manera totalmente nueva.

Espero, por tanto, que no sea necesario volver a aclarar la necesidad de redefinir los conceptos que tenemos (y que son los únicos que tenemos) de forma tal que nos permitan comenzar a transitar hacia una nueva cosmovisión.
Este proceso ya ha sido llevado adelante, cuando se pasó (algunos todavía no pasan) del primer paradigma (mítico) al segundo paradigma (científico) en donde conceptos tales como "voluntad divina" son reemplazados por conceptos tales como "fuerzas de la naturaleza".

Como el lenguaje que tenemos y usamos ha sido completamente articulado bajo el alero del Primer y Segundo paradigma, es necesario tomar los conceptos que, en su riqueza, permitan arrojar luz sobre este Tercer Paradigma, no quedando (de momento) más remedio que redefinir los conceptos que ya usamos para comunicar una Cosmovisión que, de otra manera, estaría muda.

sábado, 31 de diciembre de 2011

La Mecánica de la Ciencia

Un Problema de Gravedad




De todas las inconsistencias de la Ciencia, tal vez la más evidente y grave es, precisamente, la que tiene que ver con la fuerza de Gravedad.
De la misma exacta manera en que la enorme mayoría (tal vez la totalidad incluso) de las personas en la Edad Media creían que la tierra era plana y estaba en el centro del Universo, la mayoría de los seres humanos que actualmente habitan el planeta cree que existe una explicación científica para la fuerza de Gravedad. Pero lo cierto es que, lejos de lo que casi todo el mundo imagina, la Gravedad es uno de los pocos fenómenos en los cuales la ciencia admite abiertamente no tener explicación alguna, sólo teorías inconexas que se consideran “aproximaciones”. Escribo “aproximaciones” entre comillas, pues conditio sine qua non para hablar de aproximación es tener claridad absoluta sobre la verdadera explicación, de lo contrario podríamos incluso estar alejándonos de la verdadera explicación pues no tenemos referencia alguna sobre en donde está la certeza. 

La fuerza de gravedad es la más famosa de las leyes Físicas, sus efectos son muy sencilla y universalmente observables (basta únicamente que un árbol deje caer una manzana). Gracias a este fenómeno se sostiene todo el Universo, los movimientos de galaxias y sistemas planetarios, sin embargo no se conoce ni que la causa, ni cómo se transmite de un cuerpo a otro, ni cómo funciona internamente, no ha podido ser creada, imitada o producida en laboratorios (como se hace con el electromagnetismo y la luz, por ejemplo) y mucho menos ha podido ser interrumpida o manipulada de alguna manera. 

Cuando la ciencia habla de la fuerza de Gravedad, apenas se está limitando a constatar un fenómeno y a medirlo, sin tener la menor idea de dónde están, ni cómo actúan, ni cuales son las causas que anteceden o propician el efecto, exactamente de la misma manera que alguien puede calcular la aceleración en el movimiento de un automóvil, sin explicar qué fuerza impulsa al automóvil. El mismo Sir Isaac Newton tardó más de veinticinco años en publicar sus teorías debido a que no encontraba (y en efecto nunca encontró) una explicación científica para este fenómeno. 

La primera “aproximación” moderna sobre cómo opera la fuerza de gravedad fue dada justamente por Newton. Él planteaba que la Gravedad es una fuerza que atrae a los cuerpos del Universo, desde una simple manzana siendo jalada hacia el centro del planeta tierra gracias a la enorme masa del Globo, hasta enormes cantidades de masa concentradas en pequeños puntos en el Universo capaces de atraer la luz o incluso “tragarse” galaxias completas, los famosos hoyos negros. 

Lo que calculó con mucho éxito Newton, fue que esa fuerza de atracción es proporcional a la cantidad de materia e inversamente proporcional al cuadrado de las distancias, vale decir, mientras mayor sea la cantidad de masa que posea un cuerpo, mayor será la fuerza de gravedad (lo mismo hizo con la inercia, incluso hay científicos que hoy definen masa como una medida de la inercia) que pueda ejercer sobre otro cuerpo y, mientras mayor sea la distancia que separe a los cuerpos o a la masa agrupada en ellos, menor será la atracción gravitatoria. Sin embargo, como ya dije, este enorme científico considerado por muchos el más grande de todos los tiempos, murió sin poder explicar qué es lo que pone en acción a esta fuerza. 

Otra “aproximación” (por mencionar las más influyentes en la historia de la ciencia) es la planteada por Albert Einstein, considerado junto con Newton, un icono científico que revolucionó nuestra forma de ver el Universo y ha sido popularmente adoptado como figura símbolo de la inteligencia humana e incluso casi como una caricatura benigna del genio solitario, del loco pero brillante hombre de ciencia con un cerebro privilegiado al punto de lo sobrehumano (incluso se ha analizado su cerebro como un tesoro que guarda el secreto de una inteligencia superior). 

En una forma muy sencilla de decirlo, Einstein dio vuelta el problema de la Gravedad al postular su Teoría General de la Relatividad en la que dicha fuerza deja de ser una atracción entre masas y se entiende como una curvatura del espacio tiempo. En esta teoría las masas del Universo ya no jalan hacia su centro a las otras masas del Universo, sino que curvan el espacio en donde están situadas, de manera tal que el único movimiento posible para los objetos cercanos es una elíptica, para el caso de los planetas que orbitan el Sol, y una caída libre, para las manzanas. 

Como pueden ustedes observar, una atracción es algo muy distinto a una curvatura del espacio, mal podríamos hablar de “aproximaciones” si no hay ninguna continuidad entre el primer paso dado por Newton y el paso dado por Einstein. Lo único que tienen en común ambos conceptos es que son conceptos que se mantienen, cada uno de forma independiente y por razones distintas, dentro de las premisas materialistas, mecánicas y físicas, se mantienen dentro de la hipótesis básica de la ciencia.

El problema, para ambos casos, es que no se tiene la menor idea de que es la MASA, no se ha descubierto que partícula es responsable de que los cuerpos, todos los cuerpos del Universo, tengan esta supuesta Masa. La actual supuesta partícula responsable de la masa de las demás partículas es el teórico y famoso boson de Higgs. Esto es lo que me contestó el director del CERN, señor Luis Álvarez Gaumé, en referencia a la partícula que desesperadamente se busca para sostener la masa del Universo: "...en la versión más simple del mecanismo,hay cuatro bosones de Higgs, de los cuales se han observado tres (si no, ¿de dónde obtendrían las masas los bosones vectoriales W,Z? Falta por encontrar el cuarto, o algo que se le parezca. De hecho hay muchas teorías al respecto. Pero que algo parecido al Higgs es muy probable que aparezca es consecuencia de principio básicos de mecánica cuántica: unitariedad y localidad. Puede que estos principios básicos hasta ahora se violen, pero empezaremos a ver esas violaciones justamente cuando empecemos a ver algo que empieza a parecerse al Higgs que falta..." ( y eso que la Física, se supone, es una ciencia exacta y dura)


SONIDO

Si golpeo un tambor, provoco un movimiento en las partículas del aire, que a su vez golpean otras partículas de aire, produciendo una onda expansiva que llamamos sonido. Este efecto es similar en el agua, donde podemos ver la onda moviendo el agua si tiramos una piedra, por ejemplo. La vibración de las partículas del aire, penetran en mi oído, produciendo entonces, en mi cerebro, la percepción del sonido. Para que este fenómeno sea posible, necesitamos un medio físico, vale decir, el sonido es una onda, es una vibración que se transmite a través del aire, del agua o, como podemos sencillamente experimentar, a través de cualquier cuerpo físico. Si pongo un timbre dentro de una bomba de vidrio y posteriormente lo hago sonar, voy a poder escucharlo pero si le quito el aire a la bomba de vidrio y dejo el timbre en el vacío, no será posible que se produzca, ni menos que se transmita, la onda del sonido y por lo tanto no se podrá oír nada lo que ha sido probado muchísimas veces y puede ser repetido este experimento de forma casera por cualquiera de ustedes. 
Toda esta explicación es la que se da dentro del modelo materialista científico y no tienen nada que ver con el Tercer Paradigma que yo planteo, aclaro que los describo precisamente para dejar en evidencia las incoherencias de estas explicaciones científicas.

LUZ 

Un par de siglos atrás se suponía que la luz, al igual que el sonido, era una onda, el Sol expandía su brillo en todas direcciones igual que sucede con el ritmo de un tambor. Esta teoría científica planteó un gran problema; si la luz es una onda (al igual que el sonido), debe ser transmitida a través de algún elemento físico, por lo tanto, entre el Sol y nuestro planeta debía existir algo que sirviera a la luz como medio para llegar a iluminar nuestro planeta y todos los demás planetas y satélites naturales del sistema solar. Se supone (aún hoy) que entre nuestro planeta, el Sol, los otros planetas, nuestra Luna y todas las galaxias, estrellas, satélites naturales, cometas, etc., sólo existía un enorme espacio practicamente vació. ¿Cómo era posible entonces, que siendo la luz una onda, al igual que el sonido, pudiera transmitirse libre y velozmente por el vacío del Universo?. Siendo esto científicamente contradictorio, se pensó que debía existir entonces, una sustancia imperceptible (con lo que obviamos el conocimiento empírico) en la cual “flotaban” todos los cuerpos celestes y a través de la cual la luz se podía transmitir como onda. Esta idea, a su vez, produjo otro contrasentido; si existe dicha sustancia y nosotros “navegamos” alrededor del Sol constantemente a través de ella, ¿cómo era posible que no causara ninguna alteración en el movimiento terrestre?. 

Supongamos que el sistema solar está metido en una enorme piscina. Sabemos Científicamente que la distancia entre nuestro planeta y el Sol no varía, se mantiene en equilibrio gracias a la fuerza de gravedad que actúa entre ambas y a la fuerza centrífuga de nuestro movimiento de traslación, pero, si a la piscina supuesta la colmáramos con agua, el roce de nuestro planeta con el agua (por mencionar sólo un efecto) debe producir una disminución de nuestro movimiento de traslación, así mismo el roce con cualquier sustancia por sutil que ésta sea, debía manifestarse en el movimiento terrestre. Frente a esta paradoja, la ciencia inventó el Éter (en realidad tomó prestado el término y la idea). Todos los cuerpos celestes entonces, surcaban el Universo “flotando” en el éter. 

Pero, ¿qué era el éter?; una sustancia que reemplazaba el, hasta ahí, espacio vacío y que servía como medio para la transmisión de las ondas de la luz, pero que (convenientemente) no poseía masa (no era material) y por lo tanto no ejercía influencia alguna en el movimiento de los planetas. 

Todo hombre de ciencia sabe que la cuestión del éter sólo fue un comodín, una sustancia hecha a la medida de las necesidades científicas de la época (actualmente se inventan otros atajos para que aparentemente funcione el Modelo estándar), una “solución” momentánea, casi un chiste gallego de la “ciencia” (en este caso muy entre comillas) que en este asunto estaba más preocupada de defender sus creencias sobre cómo funciona el universo, planteando un absurdo, que de descubrir, entender y resolver finalmente el misterio que aún nos plantea la Luz. 

La “teoría” (por cortesía) del éter fue posteriormente desechada y la explicación que actualmente nos ofrece la ciencia para la transmisión de la luz, es la siguiente: La luz está compuesta por diminutas partículas llamadas fotones, los cuales no poseen masa o, actualmente, se dice que tienen masa invariante. Quiere decir esto, que la luz no se transmite, la luz viaja a través del vacío, las partículas de luz viajan desde el Sol hasta la tierra pero viajan haciendo ondulaciones igual o similar al sonido, en ambos casos puede  de hecho observarse el Efecto Doppler.


Como podemos observar, el sonido se transmite siempre a través de algo, algo material (el aire, el agua, un metal, etc.), como podemos notar, la ciencia no concibe la luz como una onda que se transmite a través del vacío, no puede aceptarlo. Los fotones no tienen masa pero existen, por pequeñas que sean estas partículas existen, son y están componiendo la Luz, siempre según la ciencia. 

La ciencia respeta la ley de causa y efecto tangible, mecánica, basada en cualquier caso en alguna fuerza, alguna sustancia o en alguna partícula. Esta cadena causa=efecto, implica una línea de acción continua, los eslabones no pueden estar separados, para la ciencia la Acción a Distancia es imposible, es una explicación no científica, precisamente porque entienden al Universo como un fenómeno mecánico. 

Un palo golpeando un tambor es algo mecánico, un grupo de partículas de aire vibrando al compás del cuero tensado y golpeado por un palo, es también un movimiento mecánico, la cadena de partículas chocando con otras partículas de aire, también es mecánico y por último, las partículas de aire que vibrando chocan con el tímpano de mi oído, es también algo mecánico. La causa es el choque del palo con el cuero del tambor, el efecto es la vibración del cuero que a su vez se transforma en causa, el efecto de esta causa es el choque del cuero con un grupo de partículas, a su vez el efecto de esta causa es la vibración de ese grupo de partículas de aire, que a su vez chocan con otras partículas de aire y que por último efecto, chocan con el tímpano de mi oído. Toda esta explicación es posible, es científica y es lógica sólo si pensamos que; tanto el palo, el tambor, las partículas de aire y mi tímpano, son algo material, tangible aprehensible, perceptible, físico. Toda esta explicación es posible, es científica y es lógica, sólo si pensamos que la ley de causa=efecto opera implacablemente siempre a través de un medio tangible. 

Volviendo a la fuerza de Gravedad, resulta que a pesar de ser ésta la energía más importante del Universo, a pesar de ser la ley más importante de la ciencia, parece desafiar justamente lo esencial para la posibilidad de la ciencia; la existencia de un sistema mecánico que la explique y la participación, por lo tanto, de elementos físicos, tangibles y corpóreos, en su acción. 

¿Qué es la fuerza de gravedad? o mejor preguntado ¿mediante qué actúa la fuerza de gravedad?, ¿es acaso una onda? y si es así, ¿qué sustancia la transmite?, ¿o es producida por partículas?. 

El hecho de que la ciencia postule la existencia de Gravitónes, para poder explicar el funcionamiento, la acción de la fuerza de gravedad, demuestra que la ciencia no puede, para seguir siendo ciencia, aceptar que la fuerza de gravedad sostenga el Universo a través del vacío, mediante nada. 

La fuerza de Gravedad tiene que ser (al igual que el sonido y la luz) un fenómeno mecánico ejercido por gravitónes para poder ser científica, de lo contrario sería algo así como aceptar que la fuerza de Gravedad es una fuerza mágica, espiritual o divina y el Universo entero se mueve gracias a la voluntad de un mago o un Dios o varios dioses o ángeles o, lo que sea, cualquier milagro menos una causa mecánica produciendo un efecto mecánico como sería científico.

lunes, 31 de octubre de 2011

Consciencia

En el anterior artículo exponía los argumentos que me llevan a sostener que el Universo es un ORGANISMO dentro del cual se desarrollan innumerables sistemas dinámicos complejos y que, desde el más simple al más complejo, todos tienen algún grado de consciencia. 


El concepto CONSCIENCIA, que explicaré y definiré a lo largo de este artículo nos permitirá entender además otro concepto clave, el de Dimensión.

CONSCIENCIA: 

Tenemos la costumbre, la creencia, de que el fenómeno que llamamos consciencia es propio del ser humano o de lo que llamamos seres vivos, sin embargo dentro de esta nueva cosmovisión las diferencias entre lo que llamamos VIVO o INERTE no serían cualitativas sino cuantitativas, dicho más claramente, al entender al Universo en su totalidad como un Organismo, desaparecen los criterios que usa la ciencia (criterios inválidos como también veremos) para determinar qué está vivo y qué está muerto o inerte. Dentro del Tercer Paradígma ni siquiera decir que todo está vivo sería plenamente correcto, aún cuando sería más sencillo entenderlo de esa manera (digamos, como transito hacia esta nueva cosmovisión). 
Si lo piensas unos minutos te darás cuenta también, de que los criterios científicos que se usan para establecer dicha diferencia no son claros y, en último caso, da también para preguntarse ¿Cómo es científicamente posible que de lo inerte surja lo vivo?, ¿en qué punto un diagrama perceptual se transforma en consciencia?, ¿cuándo una máquina cobra vida y tiene voluntad propia?. 
Desde el punto de vista científico los seres humanos no somos más que máquinas, muy complejas máquinas, pero máquinas al fin y al cabo, que se pueden reparar y que, sobre todo, están determinadas por su estructura funcional. También aquí queda en evidencia la bancarrota de la ciencia que no es capaz de explicar, ni remotamente, el fenómeno que ellos mismos llaman VIDA.
Quien ha llegado más lejos en el intento por establecer un criterio lógico y válido para determinar la diferencia entre lo vivo y lo inerte es el doctor Humberto Maturana con su concepto Autopoiesis, que quiere decir, en palabras muy sencillas, sistemas que se crean a sí mismos, sistemas cuyos cambios estructurales no están completamente determinados por el medio. El problema es que todo en el Universo es autopoietico, tanto lo que la ciencia llama moléculas o átomos como lo que yo describo en esta nueva cosmovisión como sistemas dinámicos complejos. La única diferencia es el grado de autoorganización e influencia del medio, por lo tanto, la diferencia entre lo vivo y lo inerte sigue resultando, en último caso, una diferencia cuantitativa, no cualitativa, como ya decía. (Les recomiendo que lean "De máquinas y seres vivos: Autopoiesis, La organización de los vivo").

Pensemos entonces ¿Qué es la Consciencia?

La consciencia es el resultado de la interacción entre, al menos, 2 elementos. Si imagináramos que un punto "." es capaz de ver, percibir, tener consciencia de otro punto ".", entonces ambos puntos tienen el más básico nivel de consciencia, pueden situar su existencia en relación al otro punto, pueden "decir" donde están, tienen una referencia.  

Imagínate flotando en medio de un vacío absoluto, sin que exista nada a tu alrededor. En un contexto así, no podrías saber no podrías tener consciencia sobre dónde estás, por ejemplo. 
Para entender el proceso gracias al cual surge la consciencia entonces, explicaré la más básica dimensión de la consciencia, la espacial. 

Para que un punto A pueda tener consciencia espacial necesita situarse en relación, al menos a otro punto, digamos punto B. Suponiendo a punto A solo en la nada, resulta imposible situarlo, señalar donde está, pero si cerca del punto A (digo cerca para que se entienda el ejemplo) imaginamos un punto B, entonces pueden referenciarse mutuamente, así surge el primer grado de consciencia, el de la existencia y, además, surge una Dimensión. En otras palabras, para que pueda haber consciencia tiene que existir la posibilidad de establecer una referencia, en este caso la referencia es espacial, pero pueden haber otro tipo de referencias desde las cuales uno pueda hacer comparaciones y generar un grado de consciencia mayor. 

La consciencia espacial, que no es la única pero es la más sencilla de explicar y entender, aumenta en relación directa a la cantidad de puntos de referencia existentes y percibidos. 

Por ejemplo, yo estoy en mi casa, mi casa está en Con-Con, Con-Con está en Valparaiso, Valparaiso está en Chile, Chile está en América, América está en el planeta Tierra, etc. Mi nivel de consciencia espacial es infinitamente mayor a la consciencia espacial de los punto A y B del ejemplo, porque mis posibilidades de interacción son también infinitamente mayores, mis puntos de referencia son mayores. 
La consciencia entonces, es la capacidad de interactuar con otras cosas y de entenderlas como otras, por eso no existe un "despertar de la consciencia", la consciencia aumenta exponencialmente en relación a la complejidad, no hay un estado de consciencia y otro estado de inconsciencia, hay diversos grados de consciencia.
Cada uno de nosotros es un sistema dinámico lo suficientemente complejo como para interactúar con múltiples sistemas dinámicos complejos, lo que nos permite percibir un mayor número de estímulos y entender un mayor número de conceptos, de situaciones y de Dimensiones, como le ocurre a un niño recién nacido que aún no reconoce  a su cuerpo como algo distinto del cuerpo de su madre, por ejemplo.
Los psicólogos nos dicen que un niño recién nacido no sabe que es un ser aparte de su madre, nos dicen que cree que forman una sola unidad, pero en realidad sería mucho más preciso concluir que aún no es consciente del grado de independencia que hay entre su cuerpo y el de su madre, aún no es plenamente consciente de su Dimensión espacial. Él sabe de sí mismo, lo que no sabe es como expresar su unidad, su individualidad, su independencia.

Muchos animales de hecho, cuando ven su imagen reflejada en un espejo no entienden que esa imagen en el espejo es de ellos, e intentan interactuar con la imagen como si ésta fuera otro animal, pero eso no quiere decir que ellos no tengan consciencia sobre ellos mismos, sólo quiere decir que no son capaces de vincularse a ellos con una imagen. En otras palabras, lo que varía es el grado de consciencia, pero no es que falte consciencia.

Si lo exponemos en un lenguaje al cual estamos más acostumbrados, verán que es imposible sostener que los electrones por ejemplo, no tienen consciencia. Un electrón, aún dentro de la cosmovisión científica, tiene una carga eléctrica gracias a la cual se sitúa en un nivel orbital dentro del átomo (como un planeta gira en su órbita en relación al Sol), por lo tanto está referenciado, se mueve en referencia a otra carga eléctrica, "sabe" que está en una determinada posición en relación a lo que puede percibir gracias a su carga eléctrica y las cargas eléctricas de su entorno, por lo tanto tiene un grado de consciencia espacial, por básico y mínimo que sea su espacio de referencia. Eso eso es consciencia, está ahí, no se puede negar, puede variar la interpretación del fenómeno pero el fenómeno no varía y a eso le llamo, dentro de este Tercer Paradigma, Consciencia.

Ahora, en el instante en que el punto A del ejemplo percibe, interactúa, se relaciona con el punto B, surge una Dimensión. 

DIMENSIÓN: 

En el paradigma científico actual se definen cuatro dimensiones perceptibles, tres espaciales y una temporal, todas ellas son dimensiones que existen en un espacio pre-existente. Pero en esta cosmovisión que estoy desarrollando, el Espacio no pre-existe, es UNA Dimensión más (no 3 ni 4). La interacción entre los puntos A y B del ejemplo no se produce en un espacio ya dado, el espacio es una dimensión que surge de dicha interacción, pero antes de que A y B existan no existía tampoco el Espacio.
Una analogía con la que me gusta explicar esto de las dimensiones y cómo se crean, es la siguiente:

¿Cuánto miden tus sueños?.

Antes de dormirse, el sueño que puedan tener no existe, no existen las cosas con las que puedan soñar ni existe el espacio onírico en el cual interactúan esas cosas con las que sueñan. El espacio surge y existe en cuanto hay alguna interacción, por lo tanto, defino DIMENSIÓN como el lugar que surge en la interacción de los sistemas dinámicos complejos, como un lugar común. 
En rigor tus sueños no necesitan un espacio pre-existente para poder manifestarse sino que, cuando sueñas, creas un espacio onírico dentro del cual se desarrolla tu sueño, por lo tanto tus sueños no tienen medida o tienen una medida que depende de las interacciones que se generan en tus sueños. Lo mismo sucede en la realidad.


Dentro de la cosmovisión científica existe otra paradoja, se supone que nada puede moverse más rápido que la luz, sin embargo la expansión del Universo, en los primeros instantes después del Big-Bang fue una expansión más veloz que la luz. Esto se intenta resolver de manera muy sencilla por la ciencia y están, en este punto, en lo correcto. Se dice que el espacio hacia el cual se expande el Universo no existe, se crea en la medida en la que se va creando el Universo por lo tanto no hay tal desplazamiento (desde el punto de vista científico) sino que hay creación de espacio, entonces no hay un movimiento más veloz que la luz. El problema está en que el espacio desde el cual se observa dicho fenómeno, es decir, desde el Universo ya creado por el Big-Bang, la expansión sigue siendo más veloz que la velocidad de la luz, en otras palabras, no puedes medir la velocidad de expansión del Universo desde el no Universo, desde la nada, desde lo aún no creado. 
Más curiosa resulta la cosmovisión científica cuando se observa que la aceleración de la expansión del Universo continúa, fenómeno que se "explica" gracias a la Energía Oscura, llamada así no en honor a Darth Vader sino a que, en realidad no se sabe nada de ella, ni siquiera puede ser empíricamente demostrada su existencia, sólo resulta útil en el intento de dar coherencia a un modelo que no tiene la más mínima consistencia lógica y empírica, por ningún lado.

El ser humano es un ser multidimensional, desde el punto de vista en que cada posibilidad de interacción es una dimensión dentro de la cual nos podemos mover. Lo que llamamos realidad física es una dimensión, es un lugar de interacción, es una forma de relacionarnos y tiene sus reglas, pero no es el único lugar de interacción. Por ejemplo, podemos hacer un lugar de interacción intelectual o emocional y la forma de interactuar en esos lugares es totalmente distinta, con otros códigos y otros conceptos, por lo tanto recien en estos casos hablaremos de otras Dimensiones, mientras que no hablaremos de Dimensiones distintas al estilo científico porque además (como explicaba en Lenguaje Obsoleto donde escribí sobre Dimensiones desde el punto de vista de la ciencia), esas clasificaciones científicas carecen totalmente de sentido.

Visto así un mayor grado de CONSCIENCIA es un mayor grado de complejidad y un mayor grado de complejidad permite un mayor grado de interacción y un mayor grado de interacción crea un mayor número de dimensiones, vale decir, un mayor número de interacciones posibles. 
Es probable (para que quede más claro aún) que los electrones del ejemplo anterior, no puedan interactuar emocionalmente o intelectualmente, pero si pueden interactuar espacialmente. Ahora, las razones por las cuales no puedan hacerlo no serían cualitativas sino, cuantitativas, los electrones serían sistemas dinámicos complejos muy simples aún, necesitan formar parte de sistemas dinámicos más complejos para crear así otros espacios de interacción, otras dimensiones y por lo tanto, un grado de consciencia mayor.

El ser humano puede percibir (interactúar) con sus propios sentidos, una limitada fracción del espectro lumínico y del espectro de frecuencias sonoras. Otros animales pueden percibir una fracción mayor y otro una fracción menor. Ello es lo que nos permite ser conscientes de ciertos colores y de ciertos sonidos, pero para captar otros colores u otros sonidos necesitamos ampliar nuestros umbrales perceptivos, nuestra consciencia. De momento hemos ampliado dichos umbrales a través de ciertos avances tecnológicos pero nada impide que ampliemos nuestros umbrales de manera natural (por decirlo de alguna manera), posibilidad que no hemos explorado precisamente gracias a que no lo consideramos posible dentro de nuestra cosmovisión actual, en donde aquellas personas que dicen ser capaces de interacciones más complejas son tachadas de místicos, locos, brujos, dementes o chamanes y están al margen de cualquier explicación científica. Dentro del Tercer Paradigma estos fenómenos podrían ser estudiados sin ser considerados paranormales, sencillamente porque no lo son, porque es posible entenderlos a la luz de esta nueva cosmovisión.

ATENCIÓN:

Ahora, es importante aclarar un punto, la capacidad de interactuar con otros objetos, cosas, fenómenos o sistemas dinámicos complejos (como quieras llamarles) es eso, una capacidad. Vale decir, la consciencia es la posibilidad de interactuar en alguna dimensión (espacial, emocional o intelectual, como decía en los ejemplos), pero esa posibilidad de interacción hay que entenderla y distinguirla de la ATENCIÓN. 
Si tengo puesta mi atención en la pantalla del computador es obvio que no estoy viendo la pantalla del televisor, pero no porque no me sea posible ver la pantalla del televisor (puedo interactuar con él), sino porque tengo dirigida mi atención hacia otro objeto.
Los magos, prestidigitadores y publicistas hacen precisamente eso con nuestra consciencia, toman nuestra atención y la dirigen hacia donde ellos quieren que prestemos atención, de manera tal que no seamos capaces de observar otras cosas que suceden frente a nuestras narices, pero no porque no podamos verlas, percibirlas o entenderlas, sino que porque nuestra atención está enfocada en otra cuestión, en otro objeto.
Quien haya entendido plenamente este proceso, entenderá lo sencillo que resulta el control de las masas, más aún cuando en todas las etapas del desarrollo del ser humano se encuentra presente un discurso dominante que se impone a través de la publicidad, la educación (que actualmente comienza  casi desde la sala cuna), las noticias, la historia, la cultura en general, excluyendo visiones alternativas como las que escribo o como las que plantean otros autores. Gracias a este fenómeno de la consciencia es posible literalmente construir una imagen totalmente falsa del mundo y es posible que esa imagen falsa sea considerada real, precisamente porque gran parte de la consciencia de la gente está construida en dicha interacción manipulada de la consciencia, la cual es dirigida, a través de la Atención, hacia cuestiones que no necesariamente son las más edificantes.
El contexto, el escenario en el cual nos desarrollamos como sistemas dinámicos complejos, tiene mucho que decir sobre el grado de evolución, el grado de complejidad de nuestra consciencia, precisamente porque nuestra consciencia se alimenta, se desarrolla en la interacción con un medio, como explicaba en Historia Oculta.
Quien haya llegado hasta este punto en el seguimiento de mis dos blog, este y el otro http://politicamenteincorrepto.blogspot.com/. podrá entender también ahora, lo profundamente ligados que están ambos temas.

viernes, 30 de septiembre de 2011

COMPORTAMIENTO

En el artículo anterior expuse los argumentos que me permiten sostener que al Universo no es posible describirlo como un mecanismo, sino más bien que sus características concuerdan plenamente con lo que entendemos como ORGANISMO.


Más claro queda esto cuando observamos que, no sólo sus cualidades sino además el comportamiento del Universo es, precisamente, el de un Organismo.


La principal característica de un Mecanismo es que está formado por piezas, por engranajes conectados de manera tal que, el movimiento de uno determina el movimiento de otro en una relación causa-efecto lineal absoluta. Además de eso, un mecanismo no puede hacerse más complejo por sí mismo (de hecho, tampoco puede moverse por sí mismo), no puede integrar nuevas piezas, nuevos engranajes al mecanismo de manera tal que el todo se haga funcionalmente más complejo, en otras palabras, no puede desarrollarse, evolucionar. Por ejemplo:


Una bicicleta funciona de manera mecánica, cuenta con, digamos, dos engranajes principales conectados por una cadena. A su vez, un engranaje está conectado a dos pedales y el otro está conectado a una rueda de manera tal que, cuando ejercemos nuestra fuerza en los pedales, se mueve la rueda trasera e impulsa a la bicicleta. Pero este mecanismo no puede, por sí mismo adquirir o autoañadirse otro engranaje y hacer que ese engranaje forme parte del mecanismo total de manera funcional, de hecho no puede autoañadirse nada, ni siquiera un pieza que no cumpla ninguna función práctica y que sólo lo adorne.


De la misma manera, si el Universo fuera un Mecanismo, como suponen los científicos, tampoco podría hacerse a sí mismo más complejo, tendría que algo o alguien, desde afuera del Universo, ir añadiéndole cosas que lo hagan más complejo, que lo hagan evolucionar, de manera tal que volvemos al problema de la Unidad analizado también en el artículo anterior.
Pero si entendemos al Universo como una gran Unidad (como lo explicaba en el artículo anterior), como un gran sistema cerrado, es lógicamente imposible que el Universo se añada complejidad, sería como si una bicicleta se transformara por sí misma en una moto o en un automóvil. 


Si el Universo fuera un Mecanismo en realidad sería algo estático, no podría ni moverse ni mucho menos, hacerse más complejo. Pero el Universo hace precisamente ambas cosas, se mueve y se hace cada vez más complejo, hasta el punto en que podemos decir que, el comportamiento fundamental del Universo es de complejidad creciente, la actividad por excelencia del Universo es el aumento constante de su complejidad.


Ahora, podríamos preguntarnos entonces si es posible hacer una descripción universalmente válida del Universo y por supuesto, lógica, o simplemente debemos abandonar dicha ambición. Respondí a esta pregunta en el artículo que lleva por título Paradoja Onda-Partícula en donde destaqué tres aciertos de la Filosofía que nos permiten enfrentar dicha empresa. 

En el punto número 2, señalo que: "El segundo acierto de la filosofía fue deducir que, tras todos los cambios que uno puede captar a simple vista, debe haber algo fijo, algo invariable que le dé armonía al Universo y, por lo tanto, predictibilidad. De no haber algo fijo sólo tendríamos caos, desorden y no sería posible hacer ningún calculo predictivo".

Lo que he explicado a lo largo de estas publicaciones es que la filosofía desarrolló una línea de explicación posible en la cual el elemento fijo que debe tener el Universo terminó siendo un objeto material, el famoso átomo de Demócrito de su mecanicismo materialista, modelo descriptivo que posteriormente sería conocido como científico y que se descolgó de la filosofía para constituirse en una disciplina aparte, proceso explicado en síntesis en el artículo titulado Historia de la cosmovisión científica.

En ésta nueva cosmovisión que he llamado de la complejidad creciente, el elemento fijo que le da coherencia y armonía al Universo ya no es un objeto material, sino un COMPORTAMIENTO. Al entender al Universo como un ORGANISMO y al derrumbar la absurda concepción materialista, ya no es posible remitir todo el operar del Universo a la existencia de un átomo o de un conjunto de fuerzas físicas ciegas. El Universo como un gran ser vivo, posee comportamiento y eso es posible observarlo en cualquier fenómeno que uno quiera observar.


El Universo es un organismo que busca hacerse cada vez más complejo, porque al hacerse más complejo se hace más conciente lo que permite experimentar su poder. Este organismo que es el Universo, tiene voluntad de poder y esa voluntad de poder la expresa a través de dos comportamientos básicos, atracción y dispersión.


Entiendo que esta perorata, suena a una locura extrema, por lo tanto les ruego tener paciencia y apertura de mente. Una de las razones por las que puede escucharse tan extraño lo que estoy escribiendo, es porque los conceptos que estoy usando para hacer esta nueva descripción (voluntad, poder, comportamientos, atracción y dispersión) tienen cada una un significado que parece inaplicable para hacer una descripción del Universo, pero he escogido estos conceptos porque dentro del limitado lenguaje que tenemos, me permiten, mejor que otros conceptos, explicar esta nueva cosmovisión, sin desconocer que obviamente hay que contextualizarlos y explicar el sentido que tienen dentro de este tercer paradigma. 
No debemos olvidar que el lenguaje ha sido creado y ha evolucionado en gran parte dentro del segundo paradigma, por lo que resulta necesario hacer una nueva definición, una explicación detallada del significado que tendrá, dentro de este Tercer Paradigma, cada uno de estos conceptos, en otras palabras, es necesario generar un nuevo sistema conceptual, un nuevo lenguaje.


El Universo es un Organismo, pero todos los conceptos que usa la ciencia para describirlo, son conceptos mecánicos (fuerza, partícula, espacio, energía, materia, etc.) es por eso que la ciencia falla rotundamente cuando intenta hacer una descripción coherente del Universo y es por eso también que se requiere un nuevo sistema conceptual.


En el artículo anterior, me interesa que haya quedado claro el concepto ORGANISMO. En este artículo, me interesa que quede claro que los elementos fijos que se pueden encontrar en el Universo no son fuerzas ni partículas, sino COMPORTAMIENTOS.


Llamo a toda esta explicación, teoría de la complejidad creciente, precisamente porque lo que no varia, el elemento fijo, la constante universal más evidente (no la más fundamental, tampoco la única) es la complejidad creciente.


La astrónoma Chilena María Teresa Ruiz en su libro "Hijos de las estrellas", destaca el hecho de que el Universo se comporta como una verdadera fábrica de complejidad, en donde, incluso desde el punto de vista científico, se observa que los elementos más simples del Universo se van uniendo a otros para "hacer" elementos más complejos.


(Por otro lado, me desvió levemente del tema, para señalar que ésta misma Astrónoma reconoce que la ciencia no alcanza a hacer una descripción coherente del Universo, pues hay un divorció radical - como majaderamente he señalado- entre la física clásica y la Física cuántica. Ver el video aquí)


Si uno analiza la Tabla Periódica de los elementos, podrá ver que los átomos están organizados desde el más simple (el Hidrógeno) hasta el más complejo conocido ( el Ununoctio ). Y si analizamos lo que sucede en el Universo veremos que estos elementos son literalmente fabricados gracias a lo que la ciencia llama fuerza de gravedad.


La ciencia nos dice que el 75% de la materia en el Universo es Hidrógeno y que  las partículas subatómicas se van apretando gracias a la gravedad hasta formar nuevos elementos, proceso que se conoce como Fusión Nuclear. Por ejemplo, una Enana marrón es un astro cuya atracción gravitatoria es levemente inferior a lo que se necesita para producir una fusión nuclear, vale decir, está a un paso de ser considerada una Estrella pero aún es considerado planeta, gigante, pero en términos simples, planeta.


El proceso de complejidad se podría describir en términos simples y acotados sólo a la astronomía, desde Nebulosas a Estrellas y de Estrellas a Planetas, según el nivel de complejidad de cada uno de estos objetos estelares.


Las Estrellas, una fábrica de complejidad:


Dependiendo de la masa de una estrella, ésta pasa por distintas etapas y en cada una de esas etapas va produciendo, a partir de elementos simples, elementos más complejos. Nuestro Sol, por ejemplo, está "quemando" hidrógeno para producir principalmente helio, que es el elemento que le sigue en complejidad dentro de la Tabla Periódica. 
Las estrellas sin embargo no sólo transforman hidrógeno en helio, si las condiciones son las apropiadas el helio se fusiona con otros átomos de helio y produce carbono, y la fusión de átomos de carbón con otros átomos de carbón puede pueden producir neon y así, por eso los elementos más abundantes en el Universo (de momento) son los más simples, hidrógeno, helio, carbón oxigeno y los más complejos, oro, platino, uranio son menos abundantes, estos últimos son producidos en lo que se conoce como supernova. 


Cuando las estrellas han producido elementos lo suficientemente complejos como el hierro por ejemplo, es posible entonces la existencia de planetas como el nuestro que tienen un núcleo de hierro.


Podría continuar con miles de ejemplos pero creo ya haber hecho el punto. El universo se está haciendo cada vez más complejo y eso es algo que constata también lo que llamamos Ciencia.


Las paradojas más importantes (infranqueables de hecho sin cambiar de paradigma) que enfrenta la ciencia en su descripción del Universo son.


1- Si el Universo es un mecanismo que se puso en movimiento gracias al Big-Bang ¿Cuál es la causa que provoca el efecto explosivo que la ciencia llama Big-Bang?. El famoso físico Stephen Hawking en su libro "El Universos en una cáscara de nuez" dice lo siguiente sobre este tema:


"Estamos acostumbrados a la idea de que los acontecimientos están causados por acontecimientos anteriores, los cuales, a su vez, están provocados por acontecimientos aún más anteriores. Esta cadena de causalidad se estira hasta el pasado infinito. Pero supongamos que esta cadena tuvo un comienzo. Admitamos que hubo un primer acontecimiento. ¿Cuál fue su causa? No es ésta una pregunta que muchos científicos quisieran tratar, sino que intentaban evitarla, ya fuera pretendiendo, como los rusos, que el universo no había tenido comienzo, o manteniendo que el origen del universo no pertenece al dominio de la ciencia, sino a la metafísica o la religión. En mi opinión, esta posición no debería ser adoptada por los verdaderos científicos. Si las leyes de la ciencia se suspendieran en el comienzo del universo, ¿no podrían fallar también en otras ocasiones? Una ley no es una ley si sólo se cumple a veces. Debemos intentar comprender el comienzo del universo a partir de bases científicas. Puede que sea una tarea más allá de nuestras capacidades, pero al menos deberíamos intentarlo."


2- La segunda paradoja que no puede ser resuelta de manera científica es que uno de sus postulados fundamentales es la famosa ley de conservación de la energía, también conocida como primer principio de la termodinámica, según la cual un sistema cerrado no gana ni pierde energía. La misma ciencia reconoce que el único sistema realmente cerrado es el Universo en su totalidad y si aplicamos este principio al Universo, entonces la cantidad de energía que había al principio del Universo debe ser igual a la cantidad de energía que actualmente hay en el Universo, pues nada se crea ni se destruye, sólo se transforma, según la ciencia.
¿Por qué digo que esto se presenta como una paradoja? porque la misma ciencia nos dice que antes del Big-Bang, el Universo tenía un tamaño ridículamente pequeño comparado con el tamaño actual, eso quiere decir que toda la materia, la energía, la masa del Universo (si la ley de la conservación de la energía es correcta) se encontraba concentrada en una singularidad espacio temporal tan pequeña que no es posible siquiera expresarla matemáticamente, pues sería más pequeña que la más pequeña partícula fundamental.
Lo cierto es que lo que llamamos energía y materia si es algo que se puede crear "de la nada", precisamente porque el Universo nunca ha estado hecho de nada, de la misma forma que nuestros sueños no están hechos de nada, como he explicado largamente en otros artículos.
Esto es algo que ya ha sido demostrado por otras personas que plantean también otras descripciones del Universo que tratan de ser científicas. 
Les dejo el video de una presentación de esta tecnología que, dicho sea de paso, tal vez sea una de las más espectaculares posibilidades que nos ofrece el Universo, pero en ningún caso es la única, por eso es importante también cambiar nuestro paradigma descriptivo porque ello nos permitirá ver posibilidades que están ahí, pero que nuestra forma de ver el Universo y, por tanto, de interactuar con él, no nos permite explorar.



NOTA: No confundir lo que estoy planteando con Diseño Inteligente al estilo de los creacionistas pues eso nos llevaría de vuelta al primer paradigma.

miércoles, 17 de agosto de 2011

ORGANISMO

En el origen de la filosofía hay una pregunta que generó toda la confusión, ¿de qué están hechas las cosas?. Esa pregunta ya ha sido analizada largamente y he explicado la invalides de la misma.

Descartes:

En el origen de esta nueva filosofía, este nuevo paradigma, esta nueva cosmovisión, tomamos la observación de todos los estímulos que de una u otra forma podemos percibir, como un hecho irrebatible, sin embargo rescato la duda cartesiana y estructuro una nueva descripción del Universo a partir de esa duda preguntando ya no, si existe lo observado o sólo es una ilusión en mi mente (Descartes dudo de todo menos de él como una unidad independiente), sino que preguntando ¿Cómo sé si lo observado está dentro de mí o es un estímulo externo?, ¿Dónde pongo mis límites de existencia?, ¿Cómo puedo hacer una descripción válida de lo que observo?, ¿Cómo o por qué yo me considero algo separado del Universo?, ¿Puedo estar separado de lo que observo, puedo ser algo distinto?, ¿Cómo defino qué es una UNIDAD y qué otra distinta.


En este tercer paradigma el concepto fundamental y fundacional es precisamente este; si queremos hacer una descripción válida del Universo, tenemos que asumir que todo está conectado con todo, que el mismo Universo es la única unidad y que las demás unidades que pudiéramos describir son partes de ese todo, que las divisiones que pudiéramos establecer entre una y otra cosa sólo son útiles si queremos una descripción válida del Universo y que las definiciones en rigor son arbitrarías, hasta cierto punto establecidas por criterios que podrían cambiar, que eventualmente sería el único espacio de  debate dentro de este paradigma. En otras palabras, los conceptos claves son, unidad, conciencia, dependencia, interdependencia e independencia, como cualidades que nunca son absolutas sino que varían constantemente en grado.


Unidad:

Ya expliqué que dentro del paradigma mecanicista materialista (segundo paradigma) el criterio que se utiliza para describir el universo es un criterio atomista, en el cual la Unidad sería una supuesta partícula indivisible que sería  el material del que estaría hecho todo el universo, como si el universo fuera una enorme playa en la que cada grano de arena no es más que la unidad básica de la playa y los seres vivos, se producen al azar, cuando cierta cantidad de granos de arena se unen e interactuan para formar, por ejemplo, un ser humano. Dicho de otra manera, se busca y se define algo fijo, inerte,  invariable, inmutable, (atómico), un SER Parmenídio. 


Esta verdadera obsesión con lo esencial, con lo fijo, con lo determinado, nos ha llevado incluso, dentro de las creencias místicas y religiosas, a creer que es posible alcanzar la esencia, el espíritu del ser humano como si fuera una especie de átomo divino, de la misma manera que se cree que se puede despertar la conciencia como en un acto único y definitivo, como un interruptor que enciende o apaga la luz, en lugar de entenderlo como un proceso de cambio continuo.

En este Tercer Paradigma, el Universo entero es la Unidad que se separa en Unidades progresivamente más básicas, pero sólo para efectos de una descripción racional, sólo como camino o vía de la verdad (alétheia) el SER es dinámico, fluido, en constante cambio, Heraclitiano, es un No-SER (forzando bastante el lenguaje).
Además se entiende al Universo como un Organismo, es decir, como una gran unidad efectivamente con múltiples partes gracias a las cuales "funciona" el todo y sus partes, en relaciones graduales de dependencia, interdependencia e independencia, además, las separaciones que hago entre unas y otras unidades no son del todo arbitrarias y serán fuertemente sustentadas por una detallada descripción. Este punto es oscuro, es difícil de entender, pero se comprenderá plenamente en el desarrollo de la descripción.

Ahora, entendiendo al Universo como un Organismo, los fenómenos que en el ocurren no pueden ser descritas como en el paradigma anterior, en el cual se habla de fuerzas fundamentales y se les llama fuerza fuerte, fuerza débil, fuerza de gravedad, fuerza electromagnética y, causas-efectos determinados, sino que hablaremos de comportamientos. Un organismo no es movido por fuerzas, un organismo mueve fuerzas para hacer lo que busca hacer, un organismo tiene voluntad. En otras palabras no solamente digo que el Universo entero es un enorme ser vivo, consciente, sino que digo, que hasta el sistema dinámico complejo más básico también la tiene, tiene conciencia y tiene voluntad, es voluntad, si forzamos nuevamente el lenguaje, las diferencias son diferencias en una escala de complejidad.

El Universo, como organismo, es movido por la voluntad de poder, poder que aumenta en la medida en que aumenta la conciencia y conciencia que aumenta en la medida en que aumenta la complejidad. Todo esto lo veremos muy detallado y paso a paso definiré cada concepto (voluntad, poder, conciencia, complejidad). En este artículo me interesa que quede claro que, si queremos describir al Universo, dentro de todos los conceptos que hemos desarrollado en el lenguaje, el concepto que le corresponde es el de Organismo y no el de mecanismo (como se plantea en el segundo paradigma) porque un modelo es dinámico y el otro fijo, porque en uno todas las partes están interconectadas pero la dependencia es relativa, el determinismo es relativo (lo que ha observado la llamada Teoría del Caos), mientras en el otro las partes están conectadas de manera tal que una determina a la otra en una relación causa-efecto lineal.


Analogía:


Para explicarlo haré uso de una analogía. El ser humano está estructuralmente formado con células, imagina por un minuto que tú eres una de tus células o una de las células de algún ser humano. ¿Sería descabellado imaginar que una célula puede perfectamente creerse una Unidad que interactúa con un Hábitat y no la parte de un todo?, ¿Qué diferencia hay entre un ser humano que interactúa con un medio, en un hábitat y una célula que interactúa con un medio, en un hábitat, no son ambas, partes de un todo?.
Algunos piensan y pensaran, la diferencia es la conciencia pero, ¿Qué es la conciencia?.


De eso escribiré en un próximo artículo.


Dios:


El hecho de que diga que el Universo es una Unidad Consciente llama a confusión y, como el cerebro humano funciona relacionando los conceptos de la manera que le resulta más familiar, muchos confundirán esta idea con la idea de que estoy hablando de Dios. Aclaro entonces que no pretendo hacer una descripción divina (eso sólo nos llevaría de vuelta al primer paradigma), puesto que el Dios al que hacen referencia la gran mayoría de las religiones, es un Dios que se puede encarnar en ser humano, es un Dios que rige el Universo y su destino, es una especie de dictador Universal, nada más lejano a las ideas que estoy desarrollando dentro de esta nueva cosmovisión. 

lunes, 30 de mayo de 2011

Tercer Paradigma

En el artículo anterior establecí el marco lógico dentro del cual dibujaré este Tercer Paradigma, desde ese punto de vista, todos los artículos anteriores figuran como una extensa (necesariamente extensa) introducción, y la explicación o descripción de mi “teoría” comienza con este artículo. 

Sin importar la visión que tengamos del Universo hay un hecho ineludible e incuestionable, el Universo se desarrolla hacia niveles cada vez más altos de complejidad. 
Como ya hemos visto la Ciencia describe este Universo dinámicamente complejo bajo la hipótesis de que éste sería un mecanismo ciego e inerte. En la descripción que comienzo a exponer, el Universo ya no se entendería como un mecanismo, sino como un organismo. 

En pocas y, a primera vista, incomprensibles palabras, el Universo es un sistema dinámico complejo formado por incontables sistemas dinámicos complejos cuya existencia depende del equilibrio de sus elementos y cuyos grados de libertad dependen de dos factores básicos, equilibrio y complejidad. 

Muchas personas me han pedido que trate de explicar, en pocas palabras, mi cosmovisión y bueno, ahí está. Pero si, por un lado, el párrafo anterior tiene la virtud de ser sintético, por otro lado tiene el defecto de la oscuridad. 

¿A qué me refiero con orgánico? 
¿A qué me refiero con Sistema Dinámico Complejo? 
¿ A qué me refiero con equilibrio de sus elementos? 
¿Qué quiero decir cuando digo grados de libertad?. 

Para fundar toda una nueva cosmovisión, no basta con notar las incoherencias de la cosmovisión dominante actual, luego de ello se necesita establecer todo un sistema conceptual nuevo, lo que claramente, es la parte más importante y difícil, por eso resulta inútil tratar de entender lo que digo sin antes entender los nuevos conceptos que voy a introducir y en eso hay un problema que destaca sobre los demás.
Existe una enorme ignorancia respecto a que la cosmovisión dominante no es correcta, hay una total invisibilidad de esta falta de un modelo descriptivo del Universo que resulte coherente. Incluso, muy lejos de que la gente reflexione o dude siquiera en torno a esto, hay una sostenida tendencia a creer ciegamente en que la Ciencia entrega las respuestas, la creencia en la Ciencia continua masificándose y muchos la siguen y defienden con fanatismo religioso. 
Si antes se aceptaba el "porque es palabra de Dios" como último argumento, hoy se alienta a aceptar y se acepta el, "está científicamente demostrado" con la misma intensidad y en el mismo sentido de cerrar el discurso en torno a un dogma de fe incuestionable, obviamente incuestionable, se sorprenderían si supieran la reacción fanática y dogmática que tienen connotados científicos cuando a uno se le ocurre la "mala idea" de cuestionar su Ciencia.

Unidad:

El concepto más difícil de entender, el más delicado, el más fino detalle y a su vez el más importante para entender todo lo demás, es la nueva definición de Unidad, de Identidad, de SER.

Sabemos que el Universo existe porque lo podemos percibir, como decía Descartes "Cogito Ergo Sum", es decir pienso luego, o entonces, existo (yo habría dicho, "Siento, entonces existo"). Pero, ¿como sabemos si existe todo lo demás o sólo lo estamos imaginando?, eso no es lo importante, lo importante es que el fenómeno que llamamos percepción sigue existiendo independientemente de si creemos que es un estímulo que viene del exterior o es una sensación interna. Visto así el verdadero problema no es si existe o no el Universo y todo lo que en él percibimos, el problema está en resolver en base a qué criterio determinaremos cual es el interior y cual es el exterior de, por ejemplo, una persona. En otras palabras, el problema está en cómo determinamos que una cosa es distinta a otra, de que manera podemos sostener que una cosa es una Unidad distinta a otra, con una Identidad propia. ¿Cual es el criterio que usas para determinar que la mesa que está al frente tuyo es algo distinto a ti o está fuera de ti?, ¿sabes realmente quien eres?.

Para establecer los limites que nos permiten identificar algo como una Unidad con identidad propia, lo que hacemos es DEFINIRLA, definir quiere decir marcar los límites, delimitar algo, en este caso algún concepto.

Entonces, definamos UNIDAD:

Como ya expliqué en Lenguaje Obsoleto, el criterio que actualmente usamos para hablar de Unidad es un criterio estructural material totalmente obsoleto, cito el mismo ejemplo para graficarlo: UNA persona está hecha de millones de células, UNA célula está hecha de miles de moléculas, UNA molécula está hecha de algunos átomos, UN átomo está hecho de varias partículas y ahora sabemos que UNA partícula sub-atómica no está hecha de nada, ni siquiera podemos hablar coherentemente de su existencia.
He explicado que este criterio estructural materialista no tiene sentido, falta ahora establecer un criterio que si tenga sentido y sea coherente con la llamada, "observación empírica". 
Como vimos en Paradoja Onda-Partícula no existe en el Universo, nada que responda a la definición de Partícula, es más, la misma definición de átomo, como se les conocía antes en la historia del pensamiento occidental, es una definición inválida como también he explicado. El problema que todo esto encierra se resuelve entendiendo que el Universo tiene una Estructura, pero no resulta válido entenderla como una Estructura real o irreal, material o inmaterial, es una Estructura de organización de la conciencia, pero ¿a qué me refiero con organización de la conciencia?. Vamos paso a paso.

El SER:

Tomaremos la inválida pregunta "¿de qué están hechas las cosas?" para acercarnos a entender la razón por la cual la pregunta es inválida, respondiéndola con una metáfora.
Imaginen que todo el Universo es una realidad virtual computacional, una realidad virtual no está hecha de nada, no es ni siquiera válido preguntar de qué está hecha, sin embargo nadie puede negar que los colores en la pantalla del computador existen, más allá de la manera en la que existen. Tomemos eso como una aproximación para ir entendiendo parte de este importante fundamento de esta cosmovisión.
En este Tercer Paradigma entenderemos al Universo como todo aquello que podemos saber que existe o está (aún el vacío) de alguna forma. Y lo entenderemos además como un enorme conjunto de sistemas dinámicos complejos interconectados. Veamos un ejemplo:

Diremos que el ser  humano es un sistema dinámico complejo creciente.

Complejo, porque está formado por diversas partes.
Sistema porque sus partes se relacionan entre sí dando lugar a una estructura mayor que funciona orgánicamente.
Dinámico, porque las partes que lo forman intercambian elementos, información entre si, constantemente.
Creciente, porque continua integrando elementos, información y , en el caso del ser humano, si no integra nuevos elementos es porque está "muerto", se están desintegrando sus elementos y, por tanto, deja de ser SISTEMA o estaría en una etapa de Sistema dinámico complejo decreciente.

Siguiendo con el ejemplo, este ser Humano "está hecho" de otros sistemas dinámicos complejos, por ejemplo, millones de Células y esas células a su vez "estarían hechas de" otros sistemas dinámicos complejos, por ejemplo, las moléculas, y así sucesivamente.
Pero llegará un punto en el cual encontraremos un sistema dinámico irreductiblemente complejo (como diría Michael Behe) un sistema que, de quitarle una de sus partes, desaparece completamente, no es que sus partes se separen en unidades más pequeñas que puedan integrarse a otros sistemas existentes, no, simplemente desaparece. Un sistema dinámico irreductiblemente complejo es la estructura más básica en la que es posible existir.

Veamos lo que ha encontrado la Ciencia.


"El entrelazamiento cuántico (quantum entanglement, en inglés), es una propiedad predicha en 1935 por EinsteinPodolsky y Rosen (en lo sucesivo EPR) en su formulación de la llamada paradoja EPR. El término fue introducido en 1935 por Erwin Schrödinger para describir un fenómeno de mecánica cuántica que se demuestra en los experimentos pero no se ha comprendido del todo. En este caso las partículas entrelazadas ( en su término técnico en inglés: entangled ) no pueden definirse como partículas individuales con estados definidos sino más bien como un sistema."  (copiado de Wikipedia).




Precisamente eso es lo que puede estar sucediendo, estamos hablando todo el tiempo del mismo OBJETO. Ese objeto es tal vez un sistema dinámico irreductiblemente complejo que no puede tener, en la práctica, menos propiedades, menos características. Habría que ver si es posible encontrar un sistema más simple que forme parte de éste, el experimento parece mostrar que no.
Cuando un sistema dinámico irreductiblemente complejo tiene menos propiedades, simplemente no se puede describir, no se puede conceptualizar, que no se puede DEFINIR que ya no ES algo específico, pasa a ser parte del Universo como una "energía" como una potencia, como una latencia si se quiere o, simplemente desaparece, lo que no es ningún problema ya que nunca existió como algo material. Es como el Disco duro del computador que puede alojar información y luego esa información puede ser borrada sin que eso afecte al Disco duro.


Si no tiene caracteristicas no se puede definir, si no se puede definir, no se puede conceptualizar y si no se puede conceptualizar, no podemos pensar en él, relacionarlo lógicamente con otros conceptos.


Ya expliqué que no se puede pensar sin CONCEPTOS. Ahora, en lógica a las características que nos permiten identificar un OBJETO, se le llama propiedades y esas mismas propiedades cuando se trata de Conceptos se les llama notas, por lo tanto un OBJETO sin características simplemente no puede existir, mucho menos podrá ser trasladable a un lenguaje porque si no tiene notas características entonces no puede tener un Concepto que lo represente en un Lenguaje.


Además, resulta absurdo hablar acá de acción a distancia, simplemente porque el ESPACIO en sí mismo, la distancia en sí misma, es un concepto relativo, es una ilusión de la percepción. Siguiendo con el ejemplo o la metáfora, si el Universo no está hecho de nada como decía, si el Universo es como una realidad virtual o como un sueño, qué sentido tiene preguntar ¿cuánto mide tu sueño?, ¿cuál es la distancia que abarca tu sueño?, ¿dónde está tu sueño?. Atribuirle Identidad, particularidad, Unidad a un objeto a partir de criterios que se usan en la cosmovisión científica, en donde el Universo tiene una Estructura Material, es absurdo. 


Las dos partículas del experimentos, son dos propiedades de un mismo objeto, son dos características de un mismo objeto, de un mismo sistema y la supuesta distancia que las separa no es nada más que una ilusión, en realidad todo está siempre interconectado. En el tercer Paradigma, la forma gracias a la cual unas cosas pueden interactuar con otras cosas, tiene que ver con el comportamiento del Universo, en donde el concepto de ESPACIO es absolutamente invalido, entendiendo que tiene utilidad descriptiva dentro de un lenguaje coloquial y nada más. En estricto rigor, todo el Universo es una sola Unidad, un solo Objeto, un solo Sistema Dinámico Complejo que, solamente para analizarlo y describirlo, dividiremos en millones de Sistemas Dinámicos Complejos que lo conforman. Tema aparte será, en un futuro, considerar los niveles de dependencia e interdependencia que existe entre los sistemas dinámicos complejos que forman parte del Universo, ese fenómeno será explicado cuando describa lo que llamo Conciencia y Grados de Libertad.


En la cosmovisión científica que yo considero obsoleta, este "extraño" fenómeno de "acción a distancia" o "entrelazamiento" como lo llaman, tampoco es tan atípico, tan inusual, tan extraño, la fuerza de Gravedad actúa constantemente a distancia y, supuestamente, de forma inmediata, ese es precisamente uno de los problemas que ha debido enfrentar la cosmovisión científica para tener una descripción coherente del fenómeno gravitatorio, fenómeno que aún no tiene explicación científica y que nunca tendrá explicación científica, simplemente porque la cosmovisión científica, es errada y porque la descripción, la explicación para este y otros muchos fenómenos, sólo es posible cambiando el paradigma, por eso he llamado a esta cosmovisión que largamente trato de explicar, con el nombre de Tercer Paradigma.


La nueva base entonces, para hablar lógicamente de las Unidades Mínimas en la Estructura del Universo dentro del marco del Tercer Paradigma, serán lo que llamo Sistema Dinámico Irreductiblemente Complejo, y el fenómeno que la ciencia ha llamado entrelazamiento cuántico, puede estar dándonos un ejemplo de ello.

Si algo queda cuando se separa una de las partes del sistema dinámico irreductiblemente complejo, eso que queda debiera ser llamado SER o Todo, o Dios, o Energía, pero su mejor nombre es el de Ápeiron dado por Anaximandro.
A pesar de que se le ha dado diversos nombres en esta cosmovisión no resulta necesario ponerle un nombre, lo importante es entender que, este problema se resuelve o se explica, entendiendo que no se puede describir algo INDEFINIBLE y no se puede pensar en algo que no se puede definir.
No olvidemos que "sólo podemos pensar en algo, en la medida que este algo sea, exista, en algún sentido" y aunque esta Potencia, esta Energía, este Ser, este Ápeiron existiera, no se puede pensar en él, porque no se puede definir, no se puede explicar con un concepto y "no se puede pensar sin conceptos", como majaderamente he dicho. 

CONTINUARÁ....